Sitios pequeños también
pueden encontrarse en La Habana. Lugares para reunirse
con pocos amigos, a solas con una pareja, o en la intimidad
de una reflexión. La mayoría de los hoteles poseen bares
pequeños y de ambiente familiar que permiten refugiarse
por momentos de la intensidad con que se asume la vida
en el trópico. La vitalidad citadina puede olvidarse
en sitios que pueden encontrarse dentro de la misma
ciudad. En las instalaciones de reciente apertura en
La Habana Vieja se pueden escoger entre el Café OReilly,
el Café París, el Café Oriente (un sitio exclusivo y
de lujo), el Café Mercuccio, o la amplia oferta que
se brinda en la Calle Obispo y la Plaza de Armas. El
Café La Logia, situado en el Capitolio de La Habana
(Centro Habana) es un espléndido lugar para visitar
y conocer también la historia de Cuba en la etapa republicana.
En el Vedado pueden escogerse el Marakas, el Wakamba,
el Al Fresco en el hotel Riviera. Hacia Miramar pueden
visitarse el Café Dóporto en el hotel Copacabana, o
el bar de la casa La Ferminia, entre muchos otros. Todos
los grandes hoteles tienen fabulosos Cafés, donde se
combinan la tranquilidad y la belleza del lugar con
los buenos precios.
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